Grandes lineas Minsterio de Igualdad

A partir de la comparecencia de la Ministra de igualdad ante la Comisión de Igualdad del Congreso que tuvo lugar el día 9 de junio y de la pregunta sobre ¿Cuáles son las líneas que va a desarrollar el Ministerio de Igualdad para seguir avanzando hacia una sociedad plenamente igualitaria? que fue formulada en el Pleno del Senado del día 25 de junio por la Portavoz del Grupo Socialista Carmela Silva -senadora y compañera socialista absolutamente comprometida con la igualdad- escribo unas líneas informativas sobre la respuesta de la Ministra Bibiana Aído y los compromisos del Gobierno Socialista en materia de igualdad entre hombres y mujeres para los próximos cuatro años:

La creación del Ministerio de Igualdad, la configuración de un gobierno paritario en el que por primera vez en la historia de España hay más mujeres que hombres, el nombramiento de la primera Ministra de Defensa del país son las manifestaciones más conocidas hasta el momento, del inequívoco compromiso de este gobierno con la igualdad entre hombres y mujeres. Pero hay que profundizar más y así la Ministra de Igualdad ha explicado que la creación de este ministerio no sólo tiene una significativa carga simbólica y política sino que además supone la creación de una nueva estructura en el Gobierno, con el más alto rango institucional, que permite mantener y desarrollar la lucha por la igualdad con mayor implicación de toda la Administración. Es objetivo del Ministerio de Igualdad hacer posible el paso de la igualdad formal a la igualdad real, para ello es imprescindible que se produzcan cambios estructurales, que necesariamente pasan por incorporar la igualdad en todas las esferas de la acción política y privada.

El trabajo del Ministerio de Igualdad estará marcado por el desarrollo de las dos grandes leyes aprobadas en la pasada legislatura –Ley Integral contra la violencia de género y Ley para la Igualdad efectiva entre hombres y mujeres-. Así como por la aprobación de una nueva Ley de Igualdad de Trato, un Plan Integral de Lucha contra la Trata de seres humanos con fines de explotación sexual (especialmente mujeres, niños y niñas) y el Plan Estratégico de Igualdad de Oportunidades 2008-2011. El desarrollo de estas políticas se realizará combinando dos estrategias: la transversalidad y las acciones específicas impulsadas por el Ministerio de Igualdad. Se trata de que con la orientación del Ministerio el resto del Gobierno fomente la igualdad y elimine la discriminación a través de sus políticas sectoriales.

La violencia de género sigue siendo la principal preocupación de quienes trabajamos en las políticas de igualdad y desde luego, de la Ministra de Igualdad. Por ello ha informado al Parlamento de la trascendencia que tendrá en esta legislatura el trabajo conjunto entre el gobierno central y el de las comunidades autónomas y ha apelado al consenso entre todas las fuerzas políticas para avanzar en la erradicación de esta lacra. Para impulsar esta estrategia conjunta tendrá lugar en el mes de septiembre una Conferencia de Presidentes sobre Violencia de Género de la que se espera nazca el compromiso de los Presidentes y Presidentas para abordar conjuntamente esta cuestión que se considera una auténtica política de Estado.

El Ministerio de Igualdad, por su parte, trabajará en cinco grandes objetivos para la lucha contra la violencia hacia las mujeres:
La prevención y sensibilización
La mejora de la atención a las víctimas de la violencia de género
La mejora de la respuesta profesional en las diferentes actuaciones desarrolladas sobre la violencia de género y más eficacia en los protocolos de actuación
La investigación y gestión del conocimiento sobre la violencia: como instrumento clave para seguir avanzando en respuestas acertadas.
Una actuación integral sobre la masculinidad y los hombres

La segunda prioridad del Ministerio en materia de igualdad será la lucha contra la discriminación laboral de las mujeres. Aunque en la pasada legislatura se han incrementado significativamente las cuotas de empleo femenino, la inestabilidad, la temporalidad, la precariedad y las diferencias retributivas siguen siendo características de empleo de muchas mujeres. Hay pues una profunda asimetría de género en el mercado de trabajo y debemos implicarnos al máximo en su corrección no sólo por una cuestión de justicia social sino también para incrementar la eficiencia del mercado de trabajo y la rentabilidad económica.

Para avanzar en este objetivo se pondrán en marcha todos los instrumentos que contempla la Ley de Igualdad y se trabajará conjuntamente con el Ministerio de Trabajo para el impulso de la negociación colectiva mediante la integración de los Planes de Igualdad en la mesa de diálogo social. Asimismo se dispondrán ayudas para la puesta en marcha de planes de igualdad en las PYMES. También se pondrán en marcha unidades especializadas en el asesoramiento y prevención de la discriminación en el trabajo y en el empleo en el seno de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social. Y en el marco del Acuerdo Nacional de Programas Formativos de Inserción Laboral de las Mujeres se desarrollarán acciones específicas para mujeres con más dificultades para encontrar trabajo: mayores de 45 años, víctimas de violencia de género, mujeres que han abandonado el empleo por tareas de cuidado, mujeres del ámbito rural, inmigrantes y mujeres que deseen abandonar la prostitución.

Otro eje de trabajo de la política de igualdad expuesta por la Ministra Aído es el de la corresponsabilidad en el ámbito familiar para que hombres y mujeres desarrollen un modelo de convivencia que asegure la atención de los hijos e hijas y personas dependientes junto con una plena participación en el mundo laboral y de la participación política y/o social.

A lo largo de la legislatura se ampliará el permiso de maternidad de 16 a 18 semanas por nacimiento del segundo hijo en el caso de familias monoparentales, y a 20 semanas a partir del tercer hijo. Asimismo se ampliará la duración del permiso de paternidad de 2 a 4 semanas.

También se desarrollará una nueva regulación del trabajo doméstico, para su inclusión en el Régimen General de la Seguridad Social, con el fin de terminar con la discriminación que sufren estas mujeres, muchas de ellas inmigrantes, y de mejorar sus prestaciones y condiciones de trabajo.

Estas y otras acciones completan un conjunto de medidas, planes, actuaciones, reformas legislativas y desarrollo de nuevas normas que nos permiten augurar una IX Legislatura en la que una vez más el Gobierno Socialista estará caracterizado por su compromiso inequívoco con la igualdad.
A este compromiso se suma el de trabajar para que la interrupción voluntaria del embarazo pueda practicarse en los actuales supuestos legales con todas las garantías legales tanto para las mujeres como para los profesionales y sin que se produzca vulneración alguna del derecho a la intimidad de las personas. El Ministerio de Igualdad también se ha comprometido a la creación de un grupo de expertos y expertas, sobre la vigente Ley de Interrupción Voluntaria del embarazo y la posibilidad de modificarla con el fin de garantizar la equidad en el acceso y la calidad de la prestación sanitaria. Todo ello, en el marco de una Estrategia Nacional de Salud Sexual y Reproductiva que incluya todos los aspectos relacionados con la preparación para la concepción y los nuevos usos de la reproducción asistida, la profundización en la prevención de embarazos no deseados y el impulso de la implicación de los padres en los programas de preparación al parto y de salud infantil, la creación de un portal de información de salud a las mujeres y la inclusión de programas de investigación en salud y equidad de género.

Espero que este análisis de la ley conduzca –como proponemos las socialistas asturianas en el próximo Congreso Federal del PSOE- a su reforma para garantizar la libre decisión de las mujeres sobre su cuerpo y que el aborto sea reconocido y garantizado en la red sanitaria pública. Un derecho que se contextualice en un marco normativo amplio que garantice el derecho a la salud en su más amplia acepción y por tanto confirme los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres.